Reseña: El oráculo oculto (1/5)

Título: El oráculo oculto.
Título original: The hidden oracle.
Saga: Las Pruebas de Apolo #1
Autor/a: Rick Riordan.
Editorial: Montena. (ficha del libro)
Páginas: 316.
Fecha de publicación: 2016.
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Tras enfurecer a Zeus, el dios Apolo es desterrado del Olimpo. Débil y desorientado, aterriza en la ciudad de Nueva York convertido en un chico normal. Sin sus poderes divinos y bajo la apariencia de un adolescente que disimula sus cuatro mil años de edad, Apolo deberá aprender a sobrevivir en el mundo moderno mientras busca la manera de recuperar la confianza de Zeus.

Pero entre dioses, monstruos y mortales, Apolo tiene muchos enemigos a quienes no les interesa que recupere sus poderes y vuelva al Olimpo. Cuando Apolo se ve en apuros, solo le queda un lugar donde acudir: un refugio secreto de semidioses modernos conocido como el Campamento Mestizo.

Como gran fan de los libros de Rick Riordan que soy, y como amante del Campamento Mestizo, no podía esperar a leer este libro. No pude hacerlo cuando se publicó así que las pasadas navidades fui corriendo a hacerme con él. Con todo esto de los exámenes he tenido poco tiempo para leer, y aún menos para reseñar, pero, por fin, hoy tengo un hueco para contaros todo lo que pienso sobre este libro.

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Como bien dice la sinopsis tropecientas veces, Apolo es convertido en mortal por castigo de Zeus. En su caída a la Tierra, el Dios del Sol se encuentra desorientado, preguntándose cómo y por qué él, el gran Apolo al que todo el mundo ama y teme, ha caído en semejante desgracia. ¡Y en semejante cuerpo! Él, todo un dios de miles de años de edad, dentro del cuerpo de un adolescente de dieciséis años sin apenas fuerza ni talento. ¡Y con acné! ¿Acaso no es bastante tortura ser un simple mortal? Sí, toda una tortura. Lo sabemos bien, amigo. El caso es que Apolo se encuentra solo en medio de la ciudad y sus recuerdos están distorsionados. En su caída, es atacado por un grupo de gamberros y rescatado por otra gamberra. Solo que esta gamberra es algo más especial que los otros: es una semidiosa. De quién es hija es algo que no sabe, pero lo que tiene claro es que esta muchachita no puede ser una mortal normal y corriente. Meg, nuestra nueva co-protagonista, acompaña así a Apolo en su búsqueda del Campamento Mestizo, pues no se le ocurre ningún lugar más seguro que ese, ni tampoco tiene otro sitio donde caerse muerto. Meg es una niña hiperactiva, algo estrafalaria, contestona, astuta y hábil con sus dones que nos tiene prepradas grandes escenas y un pasado muy interesante. Apolo no la soporta, pero no es que importe nada lo que Apolo quiera o no quiera durante esta nueva etapa mortal que le toca vivir.

Juntos encuentran el Campamento, y no en muy buenas condiciones. Una vez allí ven que las cosas no van tan bien como se esperaría después de haber ganado la guerra contra Gaia. Deberían seguir con sus entrenamientos de forma normal, con las relaciones estabilizadas con el Campamento Júpiter y recibiendo semidioses nuevos cada día. No obstante, lo que se encuentran es que las cosas van de mal en peor y que han dejado de recibir profecías. Aquí será donde empiece el meollo principal de la historia porque sin profecías no se puede salir a ninguna misión. Sin misiones, no pueden salvar el mundo. Y si no salvan el mundo... En fin, ya sabemos lo que pasará si los semidioses no vienen a salvar el mundo.

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Sobre los personajes, volveremos a ver a algunos de los viejos y conoceremos a algunos semidoses nuevos. Aunque en el centro siempre tendremos a Apolo, Nico di Angelo o Will Solace harán sus apariciones (sean todas bienvenidas) y, entre todos, dotarán a la historia de una nostalgia que, si sois fans (fan, fan, fan de póster como yo) de Percy Jackson, os encantarán. Nico ha cambiado muchísimo desde que lo vimos en La maldición del titán hasta ahora. No es que haya dejado de ser el niño taciturno y oscuro que era, es que ahora es mucho más seguro de sí mismo y eso no hace más que enriquecer el personaje. Gracias Rick, gracias por crear a Nico di Angelo. Aparte de las apariciones, también hay menciones a personajes veteranos que te sacan más de una sonrisa y que te hacen pensar en posibles aventuras en los siguientes libros. Pero, si de personajes veteranos hablamos, lo mejor de todo es sin duda el final del libro. Obviamente no os voy a decir nada, pero el final ha sido de las mejores partes (aunque, conociendo a Rick, no creo que os sorprenda).

En cuanto al ritmo, es básicamente igual al que acostumbra el autor en todos sus libros. Van sucediendo cosillas, van saliendo de algunos problemas... Y después viene el problema gordo, el de la batalla decisiva del libro que nos dejará con ganas de más y con la certeza de que esto no es más que el principio (sí, sé que estamos en el primer libro de una saga y que obviamente es el principio, pero Rick acostumbra a darnos mini-ataques-al-corazón en cada tomo, de ahí el comentario). Durante el desarrollo de la aventura y durante el camino que recorre Apolo para superar todos los obstáculos que se encuentra, se nos brindará una grandísima dosis de sarcasmo, acompañada de ironía y personajes con malas pulgas. Además, veremos que ambos protagonistas evolucionarán bastante de principio a fin (teniendo en cuenta que apenas hemos leído un libro), y es que tanto Meg como Apolo esconden sus cosas dentro, un pasado que no quieren, o no pueden, recordar. Esto es de agradecer más que nada porque Apolo llega a hacerse insoportable con esa actitud de soy-un-dios-por-qué-no-tenéis-inodoros-con-mi-cara. Eso hace que después valore mejor la evolución del personaje, pero en mi opinión es algo excesivo. 

Con todo esto creo que ya podéis haceros una idea de cómo es el libro y de lo que esconden sus páginas. No os hablo de la pluma de Rick Riordan porque creo que todos y todas la conocemos bien, de modo que después de tropecientas reseñas del autor me siento repetitiva al respecto. Solo decir que el libro, como siempre, se lee solo. Fácil y sencillo. ¿Algo más que añadir? Sí, ¡necesito ya The Dark Prophecy!

PD: Después de darle las cinco estrellas empecé a leer el segundo libro de Magnus Chase y me está gustando tanto que no sabía si revalorar dichas estrellas, porque comparando ambos libros, El martillo de Thor es muchísimo mejor. ¿No os pasa esto de que las estrellas se os queden cortas? Damn it!

PD2: ¡Los fanarts de Viria han sido reconocidos como arte oficial de Percy Jackson! YAY!