Pretty Little Human: Reseña: Buscando a Alaska.

¡Hola, sinsajetes! Con motivo de la publicación de Will Grayson, Will Grayson el próximo febrero y aprovechando que el blog es nuevo y aún no hay nada reseñado de John Green, voy a traer sus libros durante este mes de enero para darle la bienvenida a esta obra compartida que llega, por fin, a nuestro país. Así pues, empezamos con Buscando a Alaska, libro con el cual debutó en este mundo que tanto nos fascina.

Título: Buscando a Alaska.
Título original: Looking for Alaska.
Autor/a: John Green.
Editorial: Nube de tinta.
Páginas: 300.
Fecha de publicación: 2005.

Antes: Miles ve cómo su vida transcurre sin emoción alguna. Su obsesión con memorizar las últimas palabras de personajes ilustres lo lleva a querer encontrar su Gran Quizá (como dijo François Rabelais justo antes de morir). Decide mudarse a Culver Creek, un internado fuera de lo común, donde disfrutará por primera vez de la libertad y conocerá a Alaska Young. La preciosa, descarada, fascinante y autodestructiva Alaska arrastrará a Miles a su mundo, lo empujará hacia el Gran Quizá y le robará el corazón...

Después: Nada volverá a ser lo mismo.

Buscando a Alaska fue la novela con la que debutó este gran autor del que hoy hablamos. John Green, como todos sabemos, se caracteriza por crear personajes... peculiares, cuanto menos. En este caso nos encontramos con Miles, un chico bastante rarito para mi gusto, pues su hobby es aprender de memoria las últimas palabras de grandes celebridades. En serio, ¿qué persona que esté bien de la cabeza hace tal cosa? En fin, Miles está buscando su Gran Quizá y decide matricularse en un internado, Culver Creek, donde encontrará mucho más que eso. En Culver Creek conoce a Chip, al que todos llaman Coronel y a la impresionante, en innumerables sentidos, Alaska Young. Se les unen también Takumi y Lara, aunque estos tres constituirán el eje central de la historia.

Alaska es una chica misteriosa, atractiva, fumadora compulsiva y rara hasta decir basta que deja a Miles impactado desde el primer momento en que se ven. Alaska es de esas personas que tienes que conocer para poder tratar. ¿No os lo han dicho nunca? Personas que hasta que no las conoces no sabes cómo son y cómo debes tratarlas... Alaska es así y, en parte, por eso impresiona a Miles desde un principio, ¡qué tía más rara! Yo creo que llega a suponer un suplicio para el pobre chico.

Coronel es un bromista empedernido, con gran sentido del humor y directo cuando hay que serlo, y cuando no. Como personaje y por su papel en la historia diría que es mi personaje preferido en esta novela. Miles es un novato que no sabe por dónde tirar al que le obsesionan las últimas palabras de la gente, Alaska es aún más rara con todas sus preguntas existenciales, perdida dentro de su propia alma y Coronel es Coronel, sencillo y brillante aportando siempre su punto.

John Green es muy conocido por haber escrito Bajo la misma estrella, aunque escribió grandes historias antes de esta. Una de ellas es la que hoy os cuento. El amor de Miles hacia Alaska es inevitable, pues nadie se resiste al poder de Alaska Young, que por cierto me parece muy graciosa, y más aún curiosa, la razón por la que Alaska se llama Alaska. Fue un punto que me gustó mucho.

Me gustó mucho esta historia en términos generales, aunque no sea mi libro favorito de este autor, porque, como es costumbre ya en John Green, los personajes son muy peculiares, cada uno tiene una historia y están muy bien construidos, en mi opinión. John Green te hace conectar con sus personajes y te hace reflexionar sobre la historia y la relación que puede tener con tu vida. Esto es lo que más me gusta de la lectura, que te haga reflexionar. Una historia puede ser magnífica, fantástica y preciosa pero si te hace reflexionar pasará a ser increíble y probablemente nunca la olvides.

Siempre digo que las historias de John Green son... raras. Esta no es menos. Te mete dentro de un mundo de no ficción pero en el que la historia siempre es algo enrevesada.

"Vosotros fumáis para disfrutar. Yo fumo para morir."

En cuanto a la narración, el libro está dividido en dos partes: antes y después. Esto es algo que me sorprendió gratamente, pues siempre me gusta encontrarme con divisiones fuera de las estrictamente basadas en X capítulos. Además, esta forma de dividir la historia hace que te enganche más, pues un antes y un después implican un algo y te pasas el libro queriendo descubrir qué es ese algo.

En cuanto al final, no sabría decir si me gustó. Por una parte sí, porque me parece que está bien hilado en la mayoría de las cosas, que ayuda a Miles en su búsqueda. También pienso que es bastante sencillo para lo que podría haber sido y no sé si eso es bueno o malo, supongo que depende de tu punto de vista. Desde el mío, me parece que está bien, simplemente. Como he dicho, no es mi novela favorita de John Green, pero aún así recomiendo su lectura. Creo que toda lectura puede resultar enriquecedora y siempre hay que estar abiertos a novelas como las de este hombre que, la que más por la que menos, te obligan a hacer una gran reflexión alrededor de muchas cosas.

Buscando a Alaska es una historia de amistad, amor y experiencias nuevas que te envolverá de principio a fin.