Reseña: Hija de Humo y Hueso (1/3)

Título: Hija de Humo y Hueso.
Título original: Daughter of Smoke and Bone.
Saga: Hija de Humo y Hueso #1 (Trilogía)
Autor/a: Laini Taylor.
Editorial: Alfaguara/Punto de lectura.
Páginas: 472.
Fecha de publicación: 2011.

Karou es una estudiante de arte de 17 años que vive en Praga. Pero ese no es su único mundo. A veces, Karou desaparece en misteriosos viajes para realizar los encargos de Brimstone, el monstruo quimera que la adoptó al nacer. Tan misteriosa resulta Karou para sus amigos, como lo es para ella su propia vida: ¿cómo es que ha acabado formando parte de una familia de monstruos quimera? ¿Para qué necesita su padre adoptivo tantos dientes, especialmente de humanos? Y, ¿por qué tiene esa recurrente sensación de vació, de haber olvidado algo? De pronto, empiezan a aparecer marcas de manos en las puertas, señal de que la familia de Karou corre grave peligro. Karou tratará de cruzar al mundo quimérico para ayudarles, pero es perseguida por los serafines. Entre ellos se encuentra Akiva, un ángel arrebatadoramente hermoso al que Karou está unida de forma que ni ella misma puede imaginar.

Esta historia es una historia dividida: primero nos encontramos en el mundo humano, donde Karou, la protagonista, lleva una vida más o menos normal, si dejamos de lado las raras misiones que su "padre adoptivo, responsable, tutor no sé cómo llamarlo" le encomienda. Después encontramos Eretz, un mundo donde serafines y quimeras se encuentran inmersos en una guerra eterna que necesita terminar de una vez por todas.

Karou es un personaje un tanto peculiar. Me sorprendió porque nunca había encontrado un personaje como este. Karou estudia arte en Praga, habla tropecientos idiomas, está llena de tatuajes, tiene el pelo azul y su familia está compuesta por quimeras. Después encontramos a su amiga Zuzana. Es genial, siempre la apoya y conspira de una forma que me hace mucha gracia. Son compañeras de clase y lo comparten todo, excepto la "doble" vida de Karou. Zuzana vive al margen de todo eso pero llega un punto en que Karou tiene que escoger entre contárselo y conservar a su amiga o dejarla al margen, otra vez, y perderla.

Esta historia me encantó porque mezcla muy bien la aventura y la "misión" que Karou emprende con el amor. En este punto es donde aparece Akiva, un serafín anormalmente hermoso con una gran tristeza en su interior. Akiva y Karou se enamoran más rápido que un rayo cayendo del cielo. No obstante, Akiva se da cuenta de quién es ella en realidad y consigue arreglar el vacío que ha sentido en su interior durante toda su vida. Él sabe que llenar ese vacío hará que, muy probablemente, ella se aleje, pero debe hacerlo.

Este libro me encantó primero porque Karou era un tipo de personaje del que nunca había leído. Era un espíritu libre, inmersa en las misiones que Brimstone le enviaba y, a la vez, llevando una vida medio normal con su amiga Zuzana. Todo esto cambia con la aparición de los serafines y los descubrimientos que eso conlleva. Creo que, si no has leído este libro, es una experiencia muy grata y un sufrimiento a la vez porque Karou se encierra en sí misma por el dolor que Akiva puede llegar a causarle. 



Lo que tiene este libro es que no puedes esperar a leer el siguiente. Sí, eso pasa con muchas historias, pero creo que con esta pasa especialmente. El amor de Karou y Akiva es adictivo y la espera es insoportable. 

Recomiendo muchísimo esta lectura porque te atrapa. Yo no pude dejarlo hasta que lo terminé e iba alternando trabajos de la universidad con la lectura para perder el menor tiempo posible. 

"Karou, significa "esperanza" en la lengua del enemigo."